“Sientes mariposas en el estómago”

“Sientes mariposas en el estómago” ¿Perdiste el apetito ante una situación de angustia, un examen o una entrevista de trabajo? ¿Por qué nuestro sistema digestivo reacciona así ante las emociones? Todas nuestras emociones se generan en nuestros intestinos, al que muchos llaman: segundo cerebro, donde se produce el 90% de la serotonina.

El sistema digestivo posee una red extensa de neuronas que se encuentra entre las dos capas musculares de sus paredes. La estructura de las neuronas digestivas es totalmente idéntica a la estructura de las neuronas cerebrales y tienen la capacidad de liberar los mismos neurotransmisores, hormonas y moléculas químicas.

El cerebro intestinal libera sustancias químicas como, la serotonina (hormona de la felicidad). Por eso la importancia de alimentarnos bien y tener hábitos sanos a la hora de comer, hacer rituales de depuración, tomar licuados verdes, suplementos minerales alcalinizantes y probióticos.

También es aconsejable estimular las neuronas digestivas con técnicas de respiración abdominal, estiramientos, masajes suaves, y con calor suave y relajante, aplicado a la zona del vientre.

Te recomiendo beber 2 litros de líquidos al día, ingerir por lo menos 400 g de verdura variada cada día, consumir productos fermentados (kefir, chucrut), fruta y frutos secos. De vez en cuando es bueno acelerar el tránsito intestinal tomando jugo de ciruelas, kiwis o/y suplementos de magnesio, con eso puedes asegurar una limpieza mas profunda

¿Cómo comer?

Saborea y aprecia el proceso; sin prisa, mastica, analiza los gustos y las texturas de los alimentos, te distraigas con otras actividades simultáneas, como ver la tele o checar tu celular.

¡Relájate!

El estrés, la ansiedad y la tensión emocional pueden afectar la flora bacteriana normal. Procura hacer pausas para estar en silencio y tomar descansos a lo largo del día, practica yoga o meditación. La paz interior se refleja en un mejor estado de salud, mayor capacidad de concentración y claridad mental.

¡Muévete!

Practica ejercicio periódicamente, la actividad física rítmica y repetitiva te proporciona un magnifico bienestar. Los movimientos y estiramientos, aunque sean muy sencillos y cortos, si los realizas todos los días te activarán todos los sistemas vitales.

Señales de que algo no va bien:

Los síntomas como la acidez, el ardor, el reflujo, la pesadez, la hinchazón, el dolor, demasiados gases, la irregularidad del tránsito intestinal, nauseas, etc., son el lenguaje digestivo que te están diciendo que algo no va bien. Hay que observar por qué y cuándo aparecen las molestias e intentar corregirlo.

¿Cómo puede afectar un entorno excesivamente ácido en el sistema digestivo? El cuerpo sano suele equilibrar y controlar el pH de tejidos y de su medio ambiente. La acidificación excesiva puede ser causada por bacterias/infecciones, por procesos inflamatorios o por abuso de las comidas “acidificantes” como los hidratos de carbono y los dulces. La acidificación del contenido del intestino grueso puede ser causada por un desequilibrio de la microflora intestinal, un sobre crecimiento de las bacterias y/o hongos agresivos y por una mala alimentación.

En resumen, los síntomas intestinales pueden reflejar la personalidad y los conflictos psíquicos. Lo que es bueno para un cerebro, lo es también para el intestino, o mejor dicho, para el cerebro abdominal. Y también a la inversa: si cuidamos nuestros intestinos nuestra salud emocional lo notará y nuestro organismo en general nos lo agradecerá.